Es un hecho, cada vez más mujeres se deciden a emprender, aunque aún no las suficientes, ya que de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), las mujeres son propietarias de un tercio (36.6%) de los establecimientos micro, pequeños y medianos de manufactura, comercio y servicios privados no financieros. Sin embargo, uno de los beneficios de estos negocios para otras mujeres, es que las emprendedoras contratan a más mujeres para trabajar (dos mujeres por cada hombre), según la misma fuente.
Soy Tania Pimentel, fundadora de Women Index, la plataforma digital que reúne a mujeres de todas las profesiones para visibilizar y promover su trabajo, y a continuación te comparto algunos hábitos perjudiciales que te impiden emprender, a fin de evitarlos y continuar tu desarrollo profesional:
1. Desorganización
Al emprender, es normal que exista una variedad de situaciones diarias que nos alejen o distraigan de cumplir los objetivos, la mayoría de los cuales están relacionados con el tiempo. Para esto, te recomiendo que antes de poner manos a la obra organices tu rutina diaria para dedicar más tiempo a las actividades primordiales o prioritarias relacionadas con el negocio. No olvides también apartar tiempo para ti misma, y para fomentar la creatividad y la motivación por medio de cursos, libros, o simplemente con un rato de relajación.
2. Poca visibilización
A veces, tal vez de manera inconsciente, subestimamos nuestros conocimientos, el bien que puede traer a otros, así como la buena reputación que puede brindarnos como profesionales y por consiguiente, al nuevo emprendimiento.
La práctica contraria a esto, y mi recomendación, es hacer público tu conocimiento cuando sea posible, en conversatorios, ponencias y talleres, asesorar a otros, utilizar redes sociales con estrategia, y crear un perfil gratuito en Women Index, en donde las profesionales y emprendedoras pueden obtener más herramientas y formar parte de una importante red de apoyo.
3. Desvalorizar la experiencia
Es decir, no tomar en cuenta los consejos de otras mujeres emprendedoras que ya han pasado por nuestra situación inicial, y que han logrado resultados positivos, así como no hacer caso a otras profesionales con amplia experiencia en el mismo campo. Lo mejor es escuchar y crear redes de apoyo, de esta manera no solo aprovechas el conocimiento de otras mujeres, también ayudas a otras con empleo, fuerza de trabajo, etcétera.
4. Procrastinar
Probablemente todos hemos procrastinado en algún aspecto de la vida alguna vez, es normal, sobre todo cuando nos enfrentamos a tareas extenuantes, cotidianas o no muy agradables. Cuando se trata de emprender, normalmente posponemos planeaciones, organización y actividades relacionadas con el negocio.
Creemos que porque es nuestro, tenemos todo el tiempo del mundo para lograr avances importantes; y sí, pero no. Recuerda, tu tiempo es ahora, y en el tiempo en el que procrastinas podrías lograr avances importantísimos a mediano y largo plazo.
5. Planear, planear, y no empezar
Planear está muy bien, así como hacer uso de distintas herramientas de planificación, como agendas físicas y portátiles, pero de nada sirve todo esto si no nos atrevemos a dar el paso más importante y lanzar el negocio.
Para ayudarte, puedes empezar con la típica idea del “negocio piloto”, con la mente clara en que siempre puedes hacer ajustes, cambios y eliminar lo que no funcione para hacerlo mejor; esto ayuda a liberar un poco de estrés. No tienes por qué casarte con ninguna idea o método, mejor date la oportunidad de experimentar para descubrir qué va mejor con el negocio.
6. Negatividad
Es común que ante lo desconocido o un desafío, la mente juegue en contra y nos llene la cabeza con pensamientos de derrota, fracaso o desilusión; el miedo al fracaso es súper común, pero esto no significa que debas quedarte en este estado mental y renuncies a tu trabajo y emprendimiento. Para contrarrestar esto, establece retos a corto plazo para comenzar a ganar confianza y ve aumentando de compromiso, de esta manera te demostrarás que puedes lograrlo e irás ganando terreno.
